Desde Diálogo Chaqueño rechazamos la decisión de Milei, quien, por decreto, nombró en comisión a Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para completar la Corte Suprema, llevando a cabo otra estafa a la democracia argentina.

El presidente tiene la obligación de respetar y cumplir la Constitución, no de violentarla para su beneficio político y personal, vulnerando nuevamente las reglas de convivencia democrática y la división de los poderes constitucionales.

Este atropello a los mecanismos democráticos para la integración de la Corte Suprema se suma a la entrega de los recursos nacionales, la destrucción del Estado y una estafa monumental que humilla a nuestro país en el contexto internacional.

Desde Diálogo Chaqueño hacemos un llamado a todas las fuerzas democráticas a enfrentar esta nueva afrenta a la democracia.