Yamandú Orsi será el próximo presidente de Uruguay

Yamandú Orsi, delfín del exmandatario José “Pepe” Mujica, ganó este domingo las elecciones presidenciales en Uruguay, marcando el regreso de la izquierda al poder tras cinco años de gobierno de centroderecha. Con el 98,95% de los circuitos de votación escrutados, Orsi, del Frente Amplio, obtuvo 1.183.196 votos frente a 1.090.194 de su rival, el oficialista Álvaro Delgado, informó la Corte Electoral.

Con Orsi, el Frente Amplio vuelve al gobierno que perdió en 2020 tras tres periodos consecutivos, uno de ellos bajo Mujica (2010-2015).

Poco después de que el gobierno de Luis Lacalle Pou reconociera al nuevo presidente electo, Argentina emitió un breve comunicado en el que saludaba a Orsi y ratificaba “el compromiso de trabajar junto a Uruguay”.

Orsi, un profesor de Historia de 57 años, sucederá el 1 de marzo al presidente Luis Lacalle Pou, con un nivel de aprobación cercano al 50% pero impedido constitucionalmente de una reelección inmediata. “Voy a ser el presidente que convoque al diálogo nacional”, subrayó el ex intendente de Canelones en su primer discurso tras el triunfo. En su búnker junto a referentes del Frente Amplio y militantes, Orsi expresó: “Larga vida a nuestro sistema republicano y democrático”.

El futuro mandatario de Uruguay dejó un mensaje también para quienes eligieron a Álvaro Delgado en la segunda vuelta. “Esa gente también nos tendrá que ayudar a construir un país cada vez mejor. A ellos también los precisamos”, destacó Orsi, que salió al escenario junto a la vicepresidenta electa, Carolina Cosse.

A su turno, Lacalle Pou anunció que “comienza la transición”. “Llamé a Orsi para felicitarlo como presidente electo de nuestro país y para ponerme a las órdenes y empezar la transición apenas lo entienda pertinente”, escribió el mandatario en la red social X.

Elección dividida

En los comicios del 27 de octubre, Orsi tuvo 17,2 puntos porcentuales más que Delgado, pero en el balotaje éste contaba con el respaldo de todos los partidos de la coalición oficialista, que juntos obtuvieron el 47,7%.

Delgado, un veterinario de 55 años que fue secretario de la Presidencia de Lacalle Pou, concedió el triunfo de su rival rodeado de los socios de la alianza gobernante que lo respaldaron en esta segunda vuelta.

“Hoy los uruguayos definieron quién va a ejercer la Presidencia de la República. Y quiero mandarle aquí, con todos estos actores de la coalición, un fuerte abrazo y un saludo para Yamandú Orsi y para el Frente Amplio”, dijo, con la bandera uruguaya en la mano.

Sin golpes de timón

Uruguay, la democracia más sólida de Latinoamérica, tiene un alto ingreso per cápita y menores niveles de pobreza y desigualdad frente al resto de la región.

Pero el alto costo de vida y la delincuencia están en el centro de las preocupaciones de los votantes en este país agropecuario, con 3,4 millones de habitantes y 12 millones de cabezas de ganado.

Ninguno de los dos bloques tendrá mayoría parlamentaria puesto que en los comicios de octubre, el Frente Amplio logró 16 de los 30 escaños del Senado, y la coalición gobernante, 49 de las 99 bancas de la Cámara de Diputados.

“En la necesidad de acuerdos coincidimos todos”, dijo Orsi tras votar el domingo.

Los analistas no avizoran un golpe de timón: Orsi prometió “un cambio seguro que no será radical” y Delgado avanzar en la senda actual.

Ambos apuestan a impulsar el crecimiento económico, en recuperación tras la desaceleración por la pandemia y una histórica sequía. También se comprometieron a luchar contra el aumento de la delincuencia vinculada al tráfico de drogas.

Mujica: la muerte y los jóvenes

Mujica, un exguerrillero de 89 años referente de la izquierda mundial, tuvo una participación activa en la campaña de Orsi, a pesar de su edad y de estar recuperándose de un cáncer de esófago.

“Mi futuro más próximo es el cementerio pero me interesa la suerte de los jóvenes, que cuando tengan mi edad van a vivir en un mundo muy distinto”, dijo al votar temprano el domingo, ante un enjambre de periodistas.

En reuniones y entrevistas en el tramo final antes del balotaje, Mujica criticó la avaricia de algunos políticos, las corporaciones y a Lacalle Pou. También cuestionó el “consumismo atroz”, y habló de su legado en un tono de despedida que conmovió a muchos.

Más de 2,7 millones de uruguayos estaban habilitados para votar en un balotaje que se gana por mayoría simple. En Uruguay, el sufragio es obligatorio y no existe el voto consular.