Advierten que el hielo marino ártico se redujo un 20%
Un grupo de científicos de la NASA desmintió otro estudio que plantea que el grosor del hielo marino en el Ártico se mantuvo constante.
Un grupo de científicos de la NASA publicó recientemente un informe que alerta que el grosor del hielo marino en el Ártico sufrió una reducción de un 20 por ciento en la última década. A su vez, plantea que el descubrimiento significa un importante desarrollo de las técnicas de medición que posibilitan evaluar el espesor del hielo en la zona.
La investigación publicada en el Journal of Geophysical Research: Oceans refuta los resultados que arrojó el satélite CryoSat-2 de la Agencia Espacial Europea, que fue lanzado en 2010 y concluyó que el grosor del hielo marino en el Ártico se mantuvo constante. El estudio, en cambio, comparó los resultados iniciales que arrojó el satélite ICEsat-2 de la NASA –lanzado en 2018- con la primera misión ICEsat, que operó entre 2003 y 2009, por lo que concluyó que el grosor del hielo marino en el Ártico menguó hasta en un 20% en la última década.
Los profesionales plantean que estas diferencias de resultados se explican por el nuevo método para medir el espesor del hielo marino que permitió avanzar en el estudio de este registro de datos. De todas formas, consideran que las mediciones de ambos satélites pueden ser complementarias.
“Creo que vamos a aprender mucho al tener estos dos enfoques para medir el espesor del hielo. Podrían estar dándonos un límite superior e inferior en el espesor del hielo marino, y la respuesta correcta probablemente esté en algún punto intermedio. Hay razones por las cuales las estimaciones de ICESat-2 podrían ser bajas, y las razones por las que CryoSat-2 podrían ser altas, y necesitamos hacer más trabajo para comprender y alinear estas mediciones entre sí”, explicó Alek A. Petty, autor del estudio y científico del Centro Goddard de la NASA.
Petty precisó que el radar del CryoSat-2 permite medir la altura, mientras que el radar del ICESat-2 pasa principalmente a través de la nieve para medir la parte superior del hielo. El ICESat-2 tiene un altímetro láser que utiliza pulsos de luz para medir con precisión la altura hasta aproximadamente una pulgada. El instrumento envía a cada segundo 10.000 pulsos de luz que rebotan en la superficie de la Tierra y regresan al satélite. De esta manera, registra el tiempo que se tarda en hacer ese viaje de ida y vuelta.
“Esta es la primera vez que podemos obtener profundidad de nieve en toda la capa de hielo marino del Océano Ártico”, resaltó Ron Kwok, científico de hielo marino en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el sur de California. “La región ártica es un desierto, pero la nieve que obtenemos es muy importante en términos de clima y hielo marino aislante”, finalizó.